La recuperación total de este anfiteatro se contempló en un primer proyecto global redactado en enero de 2008, que contemplaba la intervención en las dos caveas y el entorno, pero finalmente se intervino únicamente en la cávea sur, incluyendo la realización de una serie de actividades arqueológicas que culminaron en una primera fase con el “descubrimiento” de la muralla anterior de la ciudad, de su paramento ó cara norte y de la antigua cloaca que la atravesaba por su base y que fue cegada con la construcción del anfiteatro.
Dicho proyecto se redacto con los siguientes objetivos de índole material y funcional. Entre los primeros destacan: la eliminación y disminución de los empujes de las tierras acumuladas en el trasdós de los muros, el control y la rápida evacuación de las aguas pluviales de la base de sus muros y de la base de la muralla, la protección de coronaciones de paramentos expuestos y la introducción del concepto de sostenibilidad en la intervención. Los principales objetivos de índole funcional fueron: mejora de las condiciones generales de acceso, aumento de la seguridad física en el interior así como ubicar adecuadamente las áreas destinadas a usos complementarios.